Reproducimos la entrevista realizada Ramón Alfonso, socio de Norz Patrimonia, publicada en https://economia3.com/
Si quiere salir de los modelos tradicionales de inversión como la bolsa, la renta fija o variable, las letras del tesoro, el sector inmobiliario, participaciones en empresas… les proponemos formas alternativas de inversión que, tal y como reconoce Ramón Alfonso, socio director de Norz Patrimonia, “jugarán un rol cada vez más importante en las estrategias de inversión, ya que la demanda creciente por parte de conocedores de inversiones globales ha generado un aumento significativo en los precios y en la rentabilidad de este tipo de inversión”.
En esta ocasión, nos vamos a centrar en vinos de alta gama o premium que “en los últimos años han pasado de ser un deseado objeto de colección o placer personal a convertirse en un activo rentable objeto de inversión”, reseña Alfonso.
¿Es rentable invertir en vino?
Explica que invertir en vino, “no es algo que haga todo el mundo. Este producto representa una pequeña parte de su cartera de inversión”.
De todas formas, confirma Alfonso que “sí es rentable invertir en vino” pero advierte de la importancia de ir bien asesorado sobre cómo ha ido la cosecha del año en cuestión, añadas, bodegas, climatología… “El inversor debe tener claro donde apunta ya que la mayor parte de los vinos no se revalorizarán, solo lo harán una pequeña parte”.
No debemos olvidar que los vinos de alta calidad aumentan su valor con el paso del tiempo.
¿Quién invierte en vino?
La persona que invierte en vinos lo hace para completar una cartera de inversión.
Puede haber diferentes perfiles de personas interesadas en invertir en vino. Ramón, Alfonso pone como ejemplo “una familia que ya tiene una bodega conocida y una de sus inversiones laterales y distanciadas de su propia actividad puede ser la adquisición de una colección o la inversión en la selección de vinos. Este sería el perfil más profesional”, matiza.
Un segundo perfil se correspondería con aquellas personas que aprecian el producto.
¿Cómo ‘adentrarse’ en este tipo de inversiones?
Existen varias maneras de “meterse” en esta modalidad de inversión, “si se quiere llevar a cabo con garantías de éxito” previene Ramón Alfonso.
En todas las opciones existentes, lo primordial “es ir bien asesorado, tener una idea muy clara de qué se compra, de los países y las zonas, cosechas y añadas y entender qué es lo que se está seleccionando”.
Una primera manera puede ser “comprando directamente el producto” indica el socio director de Norz Patrimonia. Pero es necesario, “contar con una cierta variedad para asegurarse el éxito, para, si se ha tomado una decisión equivocada no arruinarse”. “Por encima de los 65.000 y 100.000 euros empiezan a tener sentido las inversiones”.
Alfonso aconseja al futuro inversor contar una mayor diversificación de producto para ganar en seguridad, “ya que si un día se equivoca, porque no todos los vinos suben de precio, y estos representan solo el 20 % de su colección, va a tener un impacto menor en el resultado”.
Otra opción es llevarlo a cabo a través de fondos de inversión de gestión activa que invierten en vino en el mercado de valores.
Entre las ventajas de esta fórmula de inversión se encuentran: no tener conocimientos sobre vinos; delegar el seguimiento del mercado del vino en el gestor del fondo; y obtener una mayor diversificación en la cartera de inversiones, entre otras.
Además, puntualiza Ramón Alfonso, “invirtiendo a través de fondos de inversión se pueden obtener rentabilidades medias que pueden superar el 15 % anualizado”.
Para hacer sus previsiones, los fondos beben de Liv-ex, el mercado global para el comercio del vino. Se trata de una plataforma que recoge más de 875 millones de puntos de precio para más de 320.000 vinos, más de 620 miembros en más de 47 países.
Una tercera forma de inversión es a través de la compra de acciones de empresas que operan en el sector vinícola. En este caso, se puede elegir entre empresas productoras y distribuidoras de vino cuyas acciones coticen en bolsa.
En el caso de España, se puede invertir en bodegas riojanas y, fuera de nuestro país son interesantes empresas como Diageo (Reino Unido), Pernod Ricard (Francia) o Treasury Wine Estates (Australia), tal y como aconsejan desde el Club del Inversor.
Canales de venta
Ramón Alfonso explica que existen dos grandes canales venta. “Si el inversor compra las botellas, un canal podría ser acudir a quién se lo vendió para que le ayude a buscar un comprador. Pero se trata de una modalidad muy artesana, teniendo en cuenta el mundo digital en el que estamos inmersos”, incide.
Lo más recomendable, a juicio de Ramón Alfonso, “es acudir a subastas especializadas que tienen lugar en ciudades como Nueva York, Londres o París y que se dedican específicamente a este cometido”.
Los vinos de alta gama pueden revenderse a través de casas de subastas como Sotheby’s Wine, Christie’s Wine o Bonhams. También se puede llevar a cabo la venta en plataformas online como Wine-Searcher o WineBid, que permiten conectar con compradores de todo el mundo.
Existen también tiendas y empresas especializadas en la compraventa de vinos exclusivos como Fine & Rare Wines.
Hay que tener cuenta que muchos de los inversores son también coleccionistas y, por ende, pertenecen a algún club o sociedad de vino que pueden tener plataformas o eventos donde los miembros pueden vender sus vinos.
Finalmente, se puede asistir a ferias del sector para conectar con coleccionistas y otros compradores potenciales.
En tiempo real
El índice Liv-ex mide la evolución del precio de los vinos más exclusivos del mercado.
Según revela “El Club de Inversión”, James Miles y Justin Gibbs fundaron este índice en 2000, con el objetivo de que el comercio de vino fuera más transparente, eficiente y seguro. Hoy en día, cuentan con los siguientes índices:
Liv-ex Fine Wine 50 que rastrea los movimientos diarios de precios de los Bordeaux First Growths. Incluye las diez añadas más recientes de Lafite Rothschild, Margaux, Mouton Rothschild y Haut Brion (2011-2020) y las añadas 2006-2015 de Latour.
Liv-ex Fine Wine 100: monitorea los precios del vino fino. Representa el movimiento de precios de 100 de los vinos finos más buscados en el mercado secundario.
The Liv-ex Fine Wine 1000: rastrea 1.000 vinos de todo el mundo. Está integrado por siete subíndices que representan los vinos más comercializados de regiones de todo el mundo: Burdeos 500, Burdeos Legends 40, Borgoña 150, Champaña 50, Ródano 100, Italia 100 y Resto del Mundo 60.
Los Liv-ex tienen como referencia el precio medio para cada uno de los vinos, es decir, la media entre el precio de demanda más alto y el de oferta más bajo. Después, se multiplica este precio medio por la media de producción del mismo, que disminuye según la antigüedad del producto. Cuando cumple 25 años, lo retiran del índice, dado que el volumen disponible es ya muy bajo.